La Plaza de España es uno de los lugares mas característicos de Madrid.
Además de una fuente y distintas especies de árboles (una de ellas tiene relación con el tema que nos ocupa), se encuentra en ella el monumento al mayor novelista de la historia de España y su genial obra, la más importante de la Literatura Española. El Monumento a Miguel de Cervantes.
A los lados de tan famosos héroes de la novelesca de caballería, están dos estatuas vestidas de manera diferente, pero que muestran a la dama más importante de la novela, Dulcinea del Toboso. Juntas, ambas estatuas, representan la Fantasía y la Realidad.
El monolito está coronado por una esfera sostenida por cinco estatuas. Ésto representa la bola del mundo y los cinco continentes, que la mantienen mientras leen el Quijote.
Una ayuda para enmarcar el contexto del monumento son los árboles plantados alrededor. Se trata de Olivos, que hacen referencia a una de las aventuras (o más bien desventura) de Don Quijote. El Caballero y el escudero llegan a un olivar donde encuentran a vareadores trabajando.
Tras Cervantes, en los laterales de la base del monolito encontramos estatuas de dos de las Novelas Ejemplares del autor.
En la parte trasera del monumento, y primera que podemos apreciar al entrar en la plaza desde las Calles Gran Vía y Princesa, hay una estatua de una mujer ricamente vestida y leyendo.
A los pies de Isabel hay una fuente y a ambos lados de ésta, dos esculturas mas que representan el Valor Militar y el Misticismo, principios de la sociedad española del Siglo XVI. En la fuente se aprecian los 17 escudos de los países hispanoparlantes. Actualmente, son 20.
Entrada realizada por Aitor Sánchez Abello
Profesora de prácticas de guía, Berta Calvo Arellano